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viernes, 9 de marzo de 2012

Hospital de Fuenlabrada

En este embarazo lo tengo claro, voy a ir a dar a luz en el Hospital de Fuenlabrada que, además, es el que me corresponde.
Como comenté en la entrada El nacimiento de nuestra pequeña, a toro pasado, me doy cuenta de que no fue un parto como debería haberlo sido y, lo peor de todo no fue lo desatendidos que estuvimos, si no el hecho de que me separaran de mi hija nada más nacer y que no pudiera darle el pecho hasta tres horas después. Como esto no quiero que me vuelva a pasar, iré a este hospital.
Para quien no lo conozca o no lo sepa, el Hospital Universitario de Fuenlabrada fue galardonado por UNICEF como “Hospital Amigo de los Niños”. Esto significa que tiene como protocolo promover la lactancia materna desde el primer momento, favoreciendo a su vez el contacto piel con piel entre el recién nacido y la madre (ahora también en partos por cesárea). Además, fue el primer hospital de la comunidad de Madrid en obtener esta distinción.
Conozco a varias personas que han dado a luz allí y todas las opiniones han sido muy buenas. Aunque también me he encontrado con opiniones negativas navegando por la web, prefiero quedarme con las positivas. Entre las opciones que da a las futuras mamás este hospital está la de poder sacar al bebé, ver el proceso de parto desde un espejo o elegir la postura que resulte más cómoda a la mamá para dar a luz, siempre y cuando las condiciones lo permitan.
No administran enema ni realizan rasurado y la episiotomía se realiza de manera restrictiva y no generalizada como suele suceder en otros centros. La madre tiene la posibilidad de establecer un plan de parto, donde exponga todas las condiciones que considere que deben respetarse. Este plan de parto se facilita después al equipo médico que la atiende en el alumbramiento.
Ayer, sin ir más lejos, estuve hablando con una amiga que dio a luz en el hospital de Fuenlabrada en Septiembre y está muy contenta. Me comentó que lo mejor de todo fue que desde el primer instante, tuvo a su hija con ella, todas las pruebas que se realizan al recién nacido las hicieron sin separarlas. Y, el resto de pruebas (como la del talón o la auditiva) se realizan en la misma habitación, vamos, que ella no perdió de vista a su hija ni un segundo durante el tiempo que estuvo ingresada. Y tuvo la suerte de estar en una habitación individual, pues a pesar de ser un hospital público, cuenta en maternidad con un número de habitaciones individuales.
Tengo claro que este parto no va a ser como el primero y que quiero disfrutar de esos primeros momentos con mi hijo. ¡Ya os contaré!

martes, 6 de marzo de 2012

Asesora en lactancia materna

Este año por fin he comenzado mi formación como asesora en lactancia materna. A principios de año encontré una asociación federada que me gustó, Multilacta, me hice socia y empecé con la formación. Me han asignado una tutora que lleva ya mucho tiempo asesorando a otras madres y que está muy formada y estoy encantada.
El motivo de querer ser asesora es, básicamente, ayudar a otras madres que puedan tener algún problema durante su lactancia e intentar que no se pierdan tantas lactancias por mala información o por falta de confianza.
Como ya comenté en la entrada de Grietas, mastitis y absceso, mis comienzos en el mundo de la lactancia materna fueron complicados. Realmente creo que conseguí seguir con mi lactancia por pura cabezonería, porque sabía que era lo mejor que le podía dar a mi hija. En esos momentos, cuando tienes algún tipo de problema, el desconocimiento es el peor enemigo, los comentarios que familiares y amigos te hacen pueden llegar a ser determinantes para seguir o no adelante con el pecho. Los pensamientos arcaicos nos atacan por todos los lados, comentarios del tipo “si llora tanto es porque se queda con hambre, tu leche no es buena”, “con tantos medicamentos, la leche se queda aguada y no le llena lo mismo”, “normal que llore, la pobre está muerta de hambre”, “¡¡¡cómo vas a seguir dándole el pecho con la fiebre que tienes!!!” pueden llegar a mermar mucho la confianza que una madre primeriza tiene en su capacidad para alimentar a su hijo.
Yo no conocía la existencia de grupos de apoyo, no sabía que había lugares en los que alguien formado y con experiencia en lactancia podía ayudarte, revisar la postura y el agarre del bebé y aconsejarte sobre cómo avanzar correctamente con el pecho. Sé que gracias a estos grupos se han salvado muchas lactancias (por ejemplo, el último en el que estuve, una madre iba a dejar de dar el pecho porque creía que el medicamento que tenía que tomarse era incompatible con la lactancia) y se seguirán salvando y, me gustaría, cuando termine mi formación, poder aportar mi granito de arena.
Después de esta formación con Multilacta, me gustaría hacer la que ofrece Fedalma, que es on-line y dura prácticamente lo que un curso escolar. El mundo de la lactancia me parece muy interesante y quiero aprender cuanto más mejor, aunque ese curso ya es más caro, pero bueno, poco a poco. Terminado mi periodo de formación con Multilacta, intentaré crear un grupo de apoyo donde vivo, porque es un pueblo pequeño y creo que no hay ninguno, aunque sí que se hacen talleres para mamás en el centro de salud, pero lo voy a intentar. ¡Tengo muchas ganas!
Dejo aquí la página web de la asociación: Multilacta